Dependiendo el tipo de
fuego, es decir, del material que dio origen al mismo, conviene tener en cuenta
que existe una clase de extintor para cada situación.
El fuego se clasifica
de la siguiente manera:
Clase A
Sólidos: Madera,
pasto, papel, tela, goma, trapos, corcho, pólvora, textiles, plásticos, etc.
Clase B
Líquidos inflamables y
sólidos licuables: Gasolina, kerosene y otros derivados del petróleo, aceites, grasas, pinturas, barnices,
disolventes, alcoholes, cera, etc.
Clase C
Eléctricos: Motores,
tableros eléctricos, instalaciones eléctricas, electrodomésticos, etc.
Clase D
Metales y productos
químicos reactivos: Magnesio, titanio, sodio,
potasio, aluminio, litio, etc.
Clase K
Grasas y aceites
vegetales y animales.
De esta manera, dado
el agente extintor podemos encontrar los siguientes tipos de matafuegos:
A: Cargado con agua.
AB: Cargados con agua
y espuma química.
ABC: Cargado con polvo
químico seco o con halotron 1.
BC: Cargado con
dióxido de carbono.
D: Polvo químico.
K: Potasio
Por este motivo, para
todo establecimiento es necesario contar con el asesoramiento adecuado que
permita contar con las instalaciones y extintores indicados para la protección
contra incendio.
Me parecen muy importantes los sistemas de seguridad, debemos tener un extintor en nuestro hogar y hacerle frecuentemente un buen mantenimiento para cuando se presente una emergencia poder utiliarlo adecuadamente.
ResponderEliminarExtintores Granada